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Las gasolineras son un elemento fundamental en el transporte por carretera pero estamos tan acostumbrados a ellas que quizás no les damos el valor que tienen. En esta nueva era de migración hacia la movilidad eléctrica las gasolineras pueden jugar un papel muy importante, y aunque se acaban de incorporar a este proceso los pasos resultan evidentes. Y es que las gasolineras se empiezan ya a transformar en electrolineras, ofreciendo a los usuarios de vehículos eléctricos la posibilidad de “repostar” en las mismas instalaciones.
Una red muy amplia
Según datos de la AOP (Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos) España contaba en 2020 con 11.650 gasolineras, que ese mismo año vendieron 23.730 toneladas métricas de combustibles fósiles. En 2019 el número de gasolineras bajó en España por primera vez y se llegó a comentar incluso que “había demasiadas”. Sin embargo y como hemos comentado, al año siguiente subió ligeramente el número de estos establecimientos. Hace poco todos hemos puesto en el mapa a Petaluma, por la noticia de ser la primera ciudad de Estados Unidos que ha prohibido la instalación de más gasolineras en su territorio.
Fuera de los datos todos tenemos claro la facilidad para encontrar gasolineras, y seguro que más de una vez te has saltado alguna para utilizar otra unos kilómetros más adelante. De hecho uno de los argumentos más habituales de los detractores de la movilidad eléctrica es precisamente la abundancia de gasolineras. Para los que todavía tengan dudas y sigan atrapados por la ansiedad de rango, les recordamos que hoy en día es posible viajar con coche eléctrico por toda Europa sin ningún problema, con una mínima planificación, y por supuesto utilizando la aplicación de Electromaps.
En la actualidad, las estaciones de recarga de vehículos eléctricos están más concentradas en las ciudades, y aunque las infraestructuras están mejorando, aún habría mucho que mejorar en la red principal de carreteras, y ahí es donde la las gasolineras van a tener un papel clave.
El paso de las gasolinera a las electrolineras
Con el número de gasolineras en máximos, la movilidad eléctrica creciendo, y la necesidad de aumentar las instalaciones de puntos de recarga, tenemos el clima perfecto para la transformación de las gasolineras en electrolineras, palabra que por cierto ya aparece reconocida en algunos diccionarios.
Las estaciones de servicio habituales suelen ofrecer habitualmente servicios adicionales como supermercados, restaurantes, tiendas, cafeterías, parques infantiles. Este tipo de servicios son muy valorados por los usuarios de vehículos eléctricos, como ya vimos en la encuesta que publicamos en octubre. Las paradas para recargar pueden llevar tiempos entre los 30-60 minutos, tiempo que se puede aprovechar en estos servicios tan habituales en las gasolineras. De hecho algunas compañías petroleras han descubierto que, igual que pasa en el cine con las palomitas, el café u otros servicios adicionales puede ser su salvación: BP vende al año más de 150 millones de tazas de café.
Así pues, la instalación de puntos de recarga en las actuales gasolineras resulta un negocio más que interesante para las empresas petroleras, que además disponen de importantes recursos económicos para hacerlos. A lo mejor puedes pensar que las recargas eléctricas no son tan rentables como la gasolina, pero algunas petroleras como BP afirman que están apunto de lograr que sean incluso más rentables. El secreto está en las cargas rápidas, las flotas y en los servicios adicionales. “Si pienso en un tanque de combustible frente a una carga rápida, nos estamos acercando a un lugar donde los fundamentos comerciales de la carga rápida son mejores que los del combustible", dijo a Reuters recientemente la directora de clientes y productos de BP, Emma Delaney.
Otras compañías petroleras como Shell, que espera tener 500.000 puntos de recarga en funcionamiento para 2025, ya ha empezado a sustituir sus surtidores de gasolina por puntos de recarga. Hace unas semanas inauguró su primer hub de carga ultra rápida en Fulham (Londres), con nueve puntos de 175 kW, capaces de cargar algunos modelos de coches eléctricos actuales en apenas 10 minutos. Por cierto hubs de recarga y electrolineras, dos de las tendencias que te señalamos como claves para este 2022.
TotalEnergies también ha anunciado la instalación de puntos de recarga eléctricos en sus gasolineras de Francia que se sumarán a los que ya tiene instalados en otros países de Europa central. Repsol también anunció a finales del año pasado la instalación de 610 puntos de recarga en España y Portugal. Y así todas. No es sólo porque la movilidad eléctrica es imparable, si no también porque además es un buen negocio. Por si esto fuera poco en España la Ley de Cambio Climático y Transición Energética obliga a que las gasolineras que vendan más de 5 millones de litros a instalar puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Así que dentro de muy poco la mayoría de gasolineras, sobre todo las estaciones de servicio, ofrecerán también servicios de carga rápida para vehículos eléctricos. Pronto podríamos escuchar “su recarga, gracias” en cualquier gasolinera, convertida ya en electrolinera.
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